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Hoy os voy a hablar de los aparatos que tenemos en las ópticas y explicaros a nivel usuario para que sirven, como hay muchos y no os quiero abrumar en las sucesivas semanas os explicaré unos pocos.

No todos podemos contar con la tecnología que a continuación voy a describir. Son aparatos que tienen un alto coste y mantenimiento. Si entras en una óptica y ves todos aquellos aparatos que voy a describir tendrá más grado de especialización que en una que no cuente con tanta tecnología. En mi caso, actualmente cuento con todos y cada uno de ellos. Os los detallo a continuación:

Autorefractómetro: Ese aparato nos dice aproximadamente la graduación que tiene un paciente de forma objetiva, grado de miopía o hipermetropía y de astigmatismo, es el equivalente a mi misma en máquina. Casi siempre es erróneo ya que la mayoría de lo pacientes acomodan (fuerzan sin querer la musculatura del ojo), según se apoye el paciente en él, o si está bien calibrado o no, incluso la luz… Nos puede dar una medida errónea, pero aún con el margen de error nos da una idea de lo que puede tener un paciente, sobretodo el astigmatismo, el eje y cantidad. Es muy útil para saber si puede tener nuestro paciente opacidades en el cristalino (cataratas), ya que mide la profundidad del ojo y si no deja pasar la luz por la catarata dará error. Nuestra labor es importante a la hora de ajustarlo haciendo un subjetivo (test de letras y números). Nos indica también la distancia interpupilar o entre pupilas.

Retinoscopio: Este aparato al igual que el anterior nos sirve para saber la graduación objetiva del paciente. Se usa a falta del autorefractómetro, y en niños, personas discapacitados, etc que nos pueden falsear la graduación. Es un aparato negro, con una mango color plateado que tiene forma de varita. Lo movemos de derecha a izquierda o de arriba abajo con la mano mientras el paciente mira a un test de lejos. Nosotros vemos una serie de sombras que dependiendo del movimiento y de la intensidad nos da una idea de la graduación del paciente. Es nuestro punto de partida en muchos casos.

Queratómetro: Este aparato nos sirve para saber el radio y potencia corneal del paciente, nosotros lo usamos para sacar su grado de astigmatismo y para calcular el radio de lentes de contacto. Gracias a él sabemos si la córnea es mas o menos plana, si el astigmatismo del paciente es corneal o es interno, y si tiene una patología llamada queratocono (irregularidad corneal que afecta a la visión, la cornea en vez de ser plana en su totalidad tiene un cono o montaña en una sección de la córnea, este cono hace que la visión del paciente sea irregular cual hace que la agudeza visual sea reducida). Es un aparato que tienes que apoyar la barbilla y la frente en él y miras a un espejo en el cuál se ve tu ojo reflejado, el más comercializado es de la marca Javal, nosotros vemos dos imágenes, una roja y otra verde, que tenemos que unir, así vemos el radio de curvatura a una determinada inclinación como si fuera un reloj, ahí veremos el eje del astigmatismo. Si las miras se ven irregulares ahí tendremos el famoso queratocono que os he comentado. (Foto imagen aparatos III).

Topógrafo: Este aparato es similar al queratómetro, pero además nos hace un mapa de toda la cornea, el queratómetro solo nos da una medida central o periferica, no de la totalidad de la cornea. Gracias a éste mapa, podemos hacer la técnica llamada ortoqueratología (lentillas de geometría inversa que frenan la miopia mientras dormimos, moldean la cornea y estimulan la retina periférica para que no le suba la miopía al paciente, muy usado en niños), y podemos saber la localización exacta del queratocono, para su posterior tratamiento. Es un aparato que también apoyas la frente, primero se hace la medida de un ojo y luego la del otro ojo, tenemos que mirar a una cruz verde al fondo y muchos círculos concéntricos que se alejan y se acercan. El topógrafo esta conectado a un ordenador en el cual vemos el mapa corneal.